VIH
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Datos claves
La prueba de VIH puede realizarse de 10 a 30 días después de haberse sospechado riesgo de infección.
Se estima que el PrEP disminuye el riesgo de adquirir VIH de un 44% a un 67%.
En México, las tasas de mortalidad más altas por VIH se registran en Quintana Roo (10 fallecidos por cada 100 mil habitantes).
Se estima que 9 de cada 100 mil habitantes fallecen a causa del VIH en el Estado de Colima, México.
Tan sólo el 35% de los mexicanos entre 20 y 49 años de edad que han tenido relaciones sexuales se han practicado una prueba de VIH.
La tasa de mortalidad más alta por VIH se contempla entre los 30 y los 44 años de edad.
Los estados de Guanajuato, Michoacán, Tlaxcala, Durango, Aguascalientes, Zacatecas, Hidalgo y Coahuila tienen las tasas de mortalidad por VIH más bajas de todo México.
Las personas solteras predominan la lista de las personas fallecidas por sida.
Actualmente, en México hay aproximadamente más de 113.700 personas en tratamiento antirretroviral contra el VIH.
16 doctores ofrecen tratamiento para el VIH-Sida en doctoranytime.
Diferencia entre VIH y sida
El VIH es un virus que destruye las células del sistema inmune, haciéndolo insuficiente en su capacidad para combatir infecciones y luchar contra enfermedades. El VIH es una enfermedad de transmisión sexual, lo que significa que se transmite principalmente a través de las relaciones sexuales; aunque existe otras formas de contagio como el contacto directo con sangre infectada, la lactancia materna, entre otros. Se denomina seropositivas a las personas que han resultado positivas para VIH (virus de la inmunodeficiencia humana).
Es importante destacar la diferencia entre VIH y sida (Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida), ya que NO son lo mismo. El sida es la etapa final de la infección por el VIH. En esta etapa, el sistema inmune de la persona está tan debilitado que es altamente propenso a las infecciones, a los tumores malignos y a la presencia de cualquier enfermedad, que puede convertirse en un riesgo de muerte inminente.
No todas las personas diagnosticadas con VIH llegan a tener SIDA. De no tratarse, el tiempo transcurrido entre la infección del VIH y la aparición del SIDA varía de una persona a otra, pero generalmente puede tardar de 8 a 10 años. Si tienes sospecha de haberte infectado o de haber tenido relaciones sexuales con alguien que tenía el virus, puedes esperar de 10 a 30 días para ir a un laboratorio clínico y hacerte una prueba de VIH.
¡Sí hay tratamiento!
Hoy, existen medicamentos o combinaciones de fármacos antirretrovirales que ayudan a frenar y controlar eficazmente la enfermedad, permitiéndole a la persona seropositiva llevar una vida completamente normal. La comunidad científica ha avanzado a pasos agigantados y eventualmente se cree podrían encontrar una cura para el VIH. De hecho, existen 3 casos de personas que han sido curadas del VIH en toda la historia de la humanidad; el último caso se registró en 2022. Sin embargo, el mayor reto es que algún día estos tratamientos puedan ser utilizados a gran escala.(1)
Si el VIH se diagnostica en el momento adecuado y se inicia a tiempo el tratamiento antirretroviral, la esperanza de vida es bastante alta, incluso podría decirse que la calidad de vida de la persona seropositiva no sería diferente de la de otras personas no infectadas, ya que ahora se considera que el paciente seropositivo en tratamiento antirretroviral padece simplemente una enfermedad crónica. Así que si tienes sospecha o riesgo de haberte infectado, no tengas miedo de consultar con tu doctor y hacerte una prueba de VIH ¡si hay tratamiento efectivo!
“Es importante recalcar que la persona con VIH que tiene tratamiento se vuelve indetectable e intransmisible. Es decir, que puede tener una vida sexual totalmente normal sin el miedo de contagiar a su pareja. Cuando una persona que tiene VIH tiene una pareja que no tiene el virus, se le denomina una pareja serodiscordante. En este caso, la persona sin VIH puede tomar tratamiento preventivo como el PrEP para tener una vida sexual más abierta y sana; como cualquier otra pareja sin VIH.
Esto antes no se sabía y existía el tabú de que las personas con VIH no podrían tener relaciones sexuales con nadie o que era una sentencia de muerte debido a la falta de cura. Sin embargo, ya hay un gran avance en el tratamiento del VIH lo que permite romper estos estigmas.”
Síntomas de VIH y fases
Aunque parezca extraño, el VIH no siempre va acompañado de síntomas. Lo que determina en cierta medida si una persona desarrolla síntomas de VIH es su perfil genético. Hay personas que se enferman inmediatamente después de haberse contagiado y otros que permanecen asintomáticos durante años. La infección por VIH se produce en 4 etapas. Si el paciente seropositivo no recibe tratamiento, la enfermedad empeora con el tiempo y el virus infecta gravemente el sistema inmune. A continuación te enseñamos las fases de avance del VIH:
Fase 1: Infección primaria
Entre 2 y 4 semanas después de producirse la infección del VIH, algunas personas pueden presentar una enfermedad similar a una gripe. Esta enfermedad es también conocida como infección primaria y puede durar algunas semanas. Los síntomas de VIH agudo durante estas semanas incluyen:
- Dolores de cabeza
- Fiebre
- Erupciones cutáneas
- Diarrea
- Vómitos
- Llagas en la boca
- Dolor de garganta
- Pérdida de peso
- Tos crónica
- Sudor nocturno
- Ganglios linfáticos inflamados en el cuello
Estos síntomas de VIH agudo no suelen ser graves. Sin embargo, la transmisión del virus en esta etapa es muy fácil en comparación con las etapas posteriores, ya que el VIH circula por la sangre con una alta carga. Poco a poco el paciente controla los síntomas de la infección por sí mismo y entra en la siguiente etapa.
Fase 2: VIH Crónico
Esta segunda fase se llama infección clínica latente. Los ganglios linfáticos inflamados pueden permanecer así durante esta fase, pero la persona es asintomática. El virus permanece en el cuerpo, en los glóbulos blancos e infecta a los linfocitos. Esta etapa puede durar entre 5 y 10 años si no se inicia ningún tratamiento antirretroviral. En algunos pacientes puede durar mucho menos. En esta etapa, como en la mayoría de los casos, no hay síntomas evidentes, pero si la persona no toma la medicación puede transmitir el virus a otros sin saberlo. (2)
Fase 3: VIH Sintomático
A medida que el virus sigue destruyendo las células del sistema inmune, pueden aparecer enfermedades específicas como la neumonía, la toxoplasmosis cerebral, la meningitis criptocócica y los síntomas generales de VIH. Ahora estamos hablando de un caso de infección sintomática por el VIH, es decir, un síndrome del virus de la inmunodeficiencia humana. Algunos de los síntomas generales son:
- Diarrea crónica
- Fiebre
- Neumonía
- Pérdida de peso
- Ganglios linfáticos inflamados
- Herpes zóster
- Fatiga constante
Fase 4: El VIH se convierte en SIDA
Las personas que se encuentran bajo tratamiento antirretroviral no llegan a experimentar la última fase de evolución del virus. Sin tratamiento alguno, el VIH puede tardar de 8 a 10 años en convertirse en SIDA. En este estado, es altamente probable que aparezcan en el cuerpo diferentes cánceres e infecciones, ya que el sistema inmune está gravemente afectado. Algunos de los síntomas del sida son:
- Fiebre recurrente
- Diarrea constante
- Fiebre
- Problemas respiratorios
- Presencia de escalofríos
- Pérdida severa de peso
- Erupciones cutáneas
- Sensación de cansancio
- Ganglios linfáticos inflamados
- Herpes zóster
- Lesiones en boca y lengua
- Fatiga constante
Causas del VIH
Las principales causas del VIH son el ingreso de semen, sangre infectada o secreciones vaginales en el cuerpo. También, el VIH puede producirse por el uso de una aguja común entre consumidores de drogas, por transmisión de la madre al feto o durante la lactancia y por exposición transdérmica (Médicos, Personal de enfermería, bacteriólogos). El virus puede entrar al cuerpo de las siguientes maneras:
Relaciones sexuales:
Es posible infectarse teniendo relaciones sexuales anales, vaginales y orales con una persona que posee el virus. Cuando los fluidos biológicos contaminados como la sangre, el semen o los fluidos vaginales entran directamente en el cuerpo, existe un alto riesgo de infección. El virus también puede ingresar a través de llagas en la boca o a través de fisuras casi indetectables que pueden aparecer en la vagina o en el recto durante el coito.
“Existe posibilidad de contagio por la saliva pero únicamente si hay lesiones en la boca que pudieran exponer sangre directamente. El intercambio de fluidos, ya sea de modo genital u oral, es lo que predispone a transmitir la infección. Creer que te puedes contagiar de VIH por darte un beso con alguien, compartir cubiertos o incluso tocar a una persona con VIH, es algo completamente incorrecto. La vía de mayor contagio es la vía sexual, especialmente la anal.”
Atención: Las personas seropositivas que se encuentran bajo tratamiento antirretroviral suprimen el virus y la carga viral se vuelve indetectable, por lo que no contagiarán a sus parejas sexuales.
Transfusión de sangre:
Hoy, esta forma de infección se ha eliminado casi por completo. La sangre utilizada en las transfusiones es testeada con rigor por los bancos de sangre y por los hospitales para descartar cualquier presencia del virus y, por lo tanto, el riesgo de transmisión del VIH por transfusión de sangre es poco probable.
Compartir agujas:
El uso de agujas compartidas, generalmente en las personas con problemas de adicción a sustancias psicoactivas, aumenta enormemente el riesgo de contraer el VIH, la hepatitis y otras enfermedades.
Durante el embarazo o la lactancia materna:
Las madres seropositivas pueden transmitir el virus a sus bebés a través de la lactancia o durante el embarazo y el parto. Es importante tomar la terapia antirretroviral durante el embarazo para eliminar o mitigar el riesgo de infección para el bebé
“Así como pasa en las relaciones sexuales, las mujeres embarazadas que viven con VIH que son indetectables no le transmiten el virus al bebé que está en su vientre. Por lo tanto, es totalmente prevenible la transmisión del virus de los padres a sus hijos. Hay muchos casos de familias en las que uno o ambos padres tienen VIH pero sus hijos no tienen el virus gracias a que los padres están adecuados a su tratamiento y son indetectables.”
¿De qué formas NO se contagia el VIH?
El VIH no se transmite a través del contacto social cotidiano. No puedes contagiarte con un simple beso, un abrazo, un apretón de manos o socializando con alguien que tiene el virus. Tampoco se transmite por las picaduras de insectos, la tos o el agua y los alimentos. Por último, no se transmite por compartir la piscina o el baño. El virus no se transmite a través de la saliva, no se ha registrado ninguna transmisión del virus por medio de los besos. El principal modo de transmisión registrado son las relaciones sexuales sin uso de preservativo con una persona seropositiva que no se encuentra bajo tratamiento antirretroviral. La transmisión es muy fácil en las semanas siguientes a la infección (infección primaria). Una persona seropositiva puede transmitir el virus incluso cuando no tiene síntomas.
Prueba de VIH y diagnóstico
Es importante que si tienes sospecha o riesgo de haberte contagiado del virus te realices una prueba de VIH. Esta es la única manera en que puedes saber si eres positivo o no; no hay manera de que puedas confirmar un contagio con una inspección visual. Dicho esto, hay diferentes maneras de realizar una prueba de VIH como:
Pruebas de ácido nucleico:
Esta prueba de VIH consiste en tomar una muestra de sangre aproximadamente entre 10 a 30 días después de cuando sospeches que pudiste haberte contagiado. La muestra de sangre se envía a un laboratorio donde se analizará por expertos. La desventaja de este tipo de prueba es que su costo es considerablemente alto y deberán pasar varios días para conocer el resultado.
“Si has sido diagnosticado con VIH recientemente, mi consejo es que debes ser educado sobre lo que es en sí la enfermedad, quitarle los tabúes sociales. Esta situación amerita una consulta con un psicólogo. Esto es muy importante para aceptar su realidad y sobre todo hablar de tu pronóstico.A la vez, tienes que iniciar tratamiento y entender que de esa manera habrá una mejoría, esto junto apoyo psicológico logra mejores resultados.”
Pruebas rápidas de sangre:
Para esta prueba de VIH solo tendrás que pinchar el dedo para obtener unas pocas gotas de sangre y colocarla en una tira reactiva. Estas tiras son las mismas que se utilizan para medir niveles de glucosa, por lo que son muy confiables para determinar el VIH. Una ventaja de este tipo de prueba de VIH es que en 30 minutos puedes obtener tu resultado y puedes encontrarlas sin costo en diferentes centros de salud en el país.
Pruebas rápidas con saliva:
La prueba rápida con saliva funciona de la misma forma que la de sangre. Una prueba de VIH con muestra de saliva puedes hacerla tú mismo sin ayuda tomando un hisopo y pasándolo por dentro de tu boca hasta que este se empape de tu saliva. Posteriormente se coloca dentro de un tubo de ensayo con un reactivo que te ayudará a detectar los anticuerpos contra el VIH. Podrás conocer tu resultado en aproximadamente 20 minutos. (5)
En caso de que hayas obtenido un resultado positivo después de realizarte una prueba rápida de sangre o saliva, será necesario confirmar dicho resultado con una prueba de VIH de sangre en un laboratorio clínico. Con estos análisis de sangre, tu médico conocerá la carga viral de VIH que tienes en tu cuerpo y podrá confirmar definitivamente si eres portador del virus o no.
Tratamiento del VIH
“Si has sido diagnosticado con VIH recientemente, mi consejo es que debes ser educado sobre lo que es en sí la enfermedad, quitarle los tabúes sociales. Esta situación amerita una consulta con un psicólogo. Esto es muy importante para aceptar su realidad y sobre todo hablar de tu pronóstico.A la vez, tienes que iniciar tratamiento y entender que de esa manera habrá una mejoría, esto junto apoyo psicológico logra mejores resultados.”
Antes de hablar a profundidad sobre el tratamiento del VIH, tenemos que hacer una gran diferencia entre este término y el SIDA. Recordemos que el SIDA se produce cuando el virus del VIH entra al cuerpo pero no se controla como es debido. Con un tratamiento médico, las personas que son contagiadas por VIH pueden llevar una vida normal y, en muchos casos, jamás llegan a desarrollar SIDA.
A causa de la falta de células CD4 y del importante daño que este virus provoca al sistema inmune, el SIDA puede provocar la muerte. Gracias a los avances que ha tenido la medicina, ahora puedes evitar una muerte por VIH gracias a los diferentes tratamientos farmacológicos que existen. Por lo tanto, ser positivo para VIH no es una sentencia de muerte definitiva como se creía hace unas décadas.
El tratamiento del VIH consiste en llevar un tratamiento farmacológico compuesto por una serie de medicamentos que hacen una terapia antirretroviral. También es conocida por sus siglas TARV y su principal objetivo es reducir la carga viral que tienes en el cuerpo. La razón por la que debes iniciar un tratamiento del VIH desde que recibes un resultado positivo, es que estos medicamentos impiden que el virus siga causando estragos a tu sistema inmunitario mientras reduces el riesgo de desarrollar SIDA. Además, cuando estás en tratamiento del VIH haces que el virus sea indetectable y por tanto no contagias a tu parejas sexuales.
Este tratamiento consiste en combinar tres tipos de fármacos que buscan evitar que el VIH genere cepas que se resistan al medicamento, suprimir en la mayor medida posible el virus en la sangre y evitar que el virus tenga resistencia a la terapia antirretroviral.
Sin embargo, el tratamiento del VIH puede tener algunos efectos secundarios. De hecho, estas son la principal razón por la que las personas con VIH tienen dificultades para tomar sus medicamentos en tiempo y forma. Los efectos secundarios más comunes del tratamiento del VIH son:
- Aumento de los niveles de glucosa
- Insomnio
- Náuseas
- Diarrea
- Vómitos
- Cardiopatía
- Anomalías en el funcionamiento del riñón e hígado
- Cambios en los niveles de colesterol
Para combatir estos efectos secundarios, es necesario que tu tratamiento del VIH siempre sea supervisado por un especialista. Debes acudir puntualmente a tus citas de seguimiento para evitar una complicación o modificar el tipo de terapia antirretroviral para que pueda ser algo sostenible en tu día a día. Recuerda que estos medicamentos son los que te ayudarán a ser indetectable y vivir una feliz y larga vida. (3)
¿Sabías que?
Existen 3 casos de personas que han sido curadas del VIH en toda la historia de la humanidad; el último caso se registró en Febrero de 2022. Una mujer fue curada utilizando un nuevo método de trasplante con sangre de cordón umbilical, que abre la posibilidad de curar a más personas de lo que era hasta ahora posible; ha anunciado la comunidad científica. El mayor reto es que algún día estos tratamientos puedan ser utilizados a gran escala. (1)
“Antes se tenía la idea que tener VIH era un impedimento para tener una pareja o formar una familia, pero esto es totalmente falso. Hay que quitarse estos estigmas y retomar la concientización alrededor del VIH. Las personas que tienen VIH actualmente tienen una mejor esperanza de vida, que puede ser igual que las personas que no tienen el virus. Incluso pueden llegar a tener una mejor calidad de vida en comparación con personas que tienen algún tipo de cáncer, por mencionar un ejemplo.”
Consejos de salud
Para ayudar a que tu salud se mantenga en óptimas condiciones y reducir las molestias que puede generar el VIH, puedes incluir los siguientes cambios en tu estilo de vida:
Aumenta el consumo de alimentos saludables
Mediante la comida es que el cuerpo obtiene nutrientes. Por lo tanto, da prioridad a las verduras, cereales y proteínas sin grasa. Estas ayudan a que tu sistema inmunitario esté alerta y te ayudan a sentirte enérgico durante el día.
Mantén tus vacunas al día
pLas vacunas son una gran herramienta para evitar y combatir distintas enfermedades. Si eres positivo para VIH, es importante que reduzcas las probabilidades de tener otras enfermedades como VPH, influenza o hepatitisSolicita ayuda psicológica
El VIH traerá un gran cambio en tu vida y tener a una persona con la que puedas desahogarte es sumamente importante. Iniciar terapia con un especialista en la salud mental es una adecuada manera de obtener herramientas para aceptar este cambio de la mejor manera y también para evitar que aparezcan síntomas de ansiedad o depresión.
Incluye algún tipo de actividad física
Puede que al principio sea difícil adaptarse a los medicamentos pero una pequeña caminata por tu cuadra, bailar o simplemente una sesión de yoga puede ayudar a tu cuerpo a relajarse. De esta manera, también lo ayudas a mantener su musculatura y evitar el debilitamiento óseo.
PrEP
Uno de los métodos más novedosos para reducir el riesgo de infección por VIH es el PrEP. Este tratamiento consiste en tomar diariamente dos medicamentos combinados para inhibir la reproducción del virus del VIH en la sangre. El nombre de PrEP viene de Profilaxis Pre Exposición y funciona exclusivamente como un método de prevención, de ninguna manera debe ser usado como tratamiento del VIH una vez que te hayas contagiado. Gracias a la toma diaria de PrEP puedes reducir considerablemente las probabilidades de contraer el VIH. (6)
El PrEP es altamente recomendado cuando:
- Mantienes una alta actividad sexual con distintas personas
- Has tenido alguna infección de transmisión sexual previamente
- Participas frecuentemente en tríos o intercambio sexual de parejas
- Tienes una pareja con VIH
- Eres o tienes sexo con trabajadores/as sexuales
La protección del PrEP varía dependiendo si eres hombre o mujer. Si eres hombre, después de tomar este medicamento por una semana tendrás una máxima protección. Por otro lado, las mujeres alcanzarán el nivel más alto de protección después de 14 días aproximadamente. Se estima que el PrEP disminuye el riesgo de adquirir VIH de un 44% a un 67%. (6)
Durante este periodo inicial, el PrEP puede causar algunos efectos secundarios como:
-
Náuseas
-
Dolor de cabeza
-
Pesadillas vívidas
-
Alucinaciones
-
Mareos
-
Vómitos
Vacuna VIH: ¿Existe en México?
Desgraciadamente todavía no hay una vacuna VIH en México que haya sido aprobada por los organismos de salud correspondientes. Sin embargo, la vacuna VIH mexicana llamada “Mosaico” ya se encuentra en la fase clínica 3. Esta vacuna tiene objetivos preventivos contra el VIH y se espera que pueda ayudar a evitar más casos de SIDA en un futuro. Actualmente, la vacuna VIH “Mosaico” se está probando en distintas ciudades de nuestro país como Mérida, Guadalajara y Ciudad de México.
El objetivo de la fase clínica 3 es determinar la dosis requerida de la vacuna VIH, así como su eficacia. Posteriormente, cuando se apruebe la fase 4 de esta vacuna VIH, se podrá determinar su funcionamiento real.
Esta vacuna se realiza con ayuda de células del cordón umbilical, las cuales se utilizan para tratar diversas enfermedades actualmente. Se espera que en los próximos 3 o 4 años se pueda llegar a la última fase clínica y comenzar con el uso preventivo de esta vacuna VIH. (4)
Costo tratamiento VIH
En México, puedes iniciar el PrEP (tratamiento preventivo del VIH) de dos maneras:
- Adquirirlo de manera privada: Esta es la forma más sencilla, ya que se ha comercializado en el sector privado desde hace algunos años. De hecho, México es el primer país en Latinoamérica donde se puede adquirir PrEP en farmacias de cadena.
- Inscribirse a la terapia de PrEP en el sector público: Para acceder a esta iniciativa de prevención de manera gratuita, puedes hacerlo mediante el Instituto Mexicano del Seguro Social. Debes realizar un registro en su portal y en máximo 10 días serás contactado para agendar una cita médica. Durante esta cita médica, serás evaluado por especialistas para determinar si eres un candidato idóneo para el uso de PrEP. (7)
El precio estimado de 30 tabletas de PrEP (el equivalente a un mes) puede costar:
Desde $4,500 MXN hasta $15,000 MXN
Tratamiento antirretroviral para VIH de manera privada x mes:
Desde $6,000 MXN hasta $20,000 MXN
Costo prueba de VIH en laboratorios privados:
Desde $500 MXN hasta $1.100 MXN
Mitos y verdades sobre VIH
El VIH tiene cura si se detecta a tiempo.
La comunidad científica está avanzando y usando de ejemplo los 3 casos de personas que se han curado del VIH en todo el mundo para que ojalá, en un momento, el tratamiento con células madre de cordón umbilical sea replicable a escala. Sin embargo, puedes llevar un tratamiento farmacológico que te permitirá vivir de manera normal y ser indetectable. De no llevar el tratamiento al pie de la letra, puedes experimentar distintos problemas de salud a largo plazo como daño a tus riñones o cardiopatías.
Ya existe una vacuna VIH que ayuda a prevenir un contagio.
Existe una vacuna VIH que, en efecto, tiene como objetivo mostrarle al cuerpo como luchar contra el VIH de manera eficaz si se llega a tener relaciones con una persona que ya lo tenga y no haya utilizado protección. Esta vacuna VIH solo se puede aplicar a personas que sean negativas a este virus pero todavía no ha sido aprobada por organismos como la FDA. Esto quiere decir que la vacuna VIH se encuentra en las etapas iniciales de un ensayo clínico con la esperanza de que sea aprobada para producir en masa en un futuro.
Las manchas por VIH son una de las primeras señales de contagio.
Sí, en las primeras etapas del contagio de VIH es común la aparición de manchas o erupciones cutáneas. Estas manchas por VIH pueden ser de tono rojizo o descoloridas. Su característica principal es que no causan picazón y aparecen en distintas zonas del cuerpo. El ser contagiado por VIH implica que tu sistema inmunitario sufrirá diferentes cambios que pueden ser perjudiciales para tu salud si no tomas tratamiento y las manchas por VIH son las primeras señales.
No hay una diferencia entre VIH y SIDA.
Esto es incorrecto, ya que sí existe una gran diferencia entre VIH y SIDA. El VIH es un virus que ataca directamente el sistema inmunitario y, de no ser tratado adecuadamente, puede desarrollarse en SIDA. Es importante tener clara esta diferencia entre VIH y SIDA, ya que no diferenciar estos términos puede llevar a equivocaciones. La principal es que se cree que todas las personas que tienen VIH desarrollan SIDA, lo cual es incorrecto. Si se lleva un tratamiento farmacológico adecuado, el VIH no progresa en el sistema inmune y puede pasar desapercibido por muchos años.
La probabilidad de contagio de VIH en una sola exposición es muy baja.
La probabilidad de contagio de VIH en una sola exposición dependerá del tipo de contacto que se tenga con la persona portadora del virus. La manera en la que tienes mayores probabilidades de contagiarte de VIH es mediante una relación sexual anal sin protección. Después de este tipo de contacto le siguen el sexo vaginal y el que presenta menores probabilidades es el sexo oral. Por lo tanto, la probabilidad del contagio de VIH en una sola exposición puede variar.
No se puede detectar el virus con una simple prueba de VIH.
Esto es verdadero. Las pruebas rápidas detectan los anticuerpos que se generan después de un contagio de VIH. Por lo tanto, para confirmar tu resultado positivo o negativo será necesario que te realices una prueba de VIH donde tu sangre sea analizada por un laboratorio clínico especializado y se pueda detectar la carga viral que tengas.
Perguntas frequentes
¿Cómo prevenir el VIH?
- Limitar el número de parejas sexuales que tengas
- Utilizar condones en cada acto sexual que realices, sin importar si es anal o vaginal
- Revisar que todas las jeringas que utilices sean nuevas y esterilizadas
- Realizarte una prueba de VIH se manera periódica para descartar un contagio
Los primeros síntomas de VIH pueden variar de persona a persona. Los más comunes son:
- Fatiga
- Fiebre
- Erupciones en la piel
- Inflamación en los ganglios linfáticos
- Dolor muscular
- Vómitos
- Molestias en la garganta
Las probabilidades de que te contagies de VIH mediante sexo oral son muy bajas. Sin embargo, si alguna de las personas tiene llagas o heridas sangrantes en la boca la probabilidad de contagiarse de VIH son mucho mayores.
Algunos de los síntomas de VIH en mujeres más recurrentes son:
- Infecciones vaginales constantes
- Pérdida de peso sin razón aparente
- Revisar que todas las jeringas que utilices sean nuevas y esterilizadas
- Diarrea constante
- Tos seca
- Sarpullido en la piel
- Bultos en la boca o genitales
Los primeros síntomas del VIH pueden aparecer después de dos semanas o incluso un mes tras haberse contagiado. Esto puede variar y muchas veces los síntomas pueden pasar desapercibidos o atribuirse a una gripe
Las pruebas rápidas de sangre o de saliva son consideradas una prueba de VIH casera. Estas son muy confiables pero si llegan a ser positivas, tu médico te solicitará que te realices una prueba de sangre en un laboratorio para llegar a un diagnóstico definitivo. Por lo tanto, si es confiable realizarte una prueba de VIH casera, pero la opinión de un médico será necesaria para tener un diagnóstico y un tratamiento adecuado.